Fibroma plantar operacion
Tiempo de recuperación de la cirugía del fibroma plantar
El síntoma más común de un fibroma plantar es el dolor en el arco del pie. El uso de zapatos puede ejercer presión en la planta del pie y hacer que el dolor sea más perceptible. Los fibromas grandes pueden causar una sensación de presión en el arco. Pueden sentirse como un guijarro o una canica bajo el pie y es posible que pueda verlos bajo la superficie de la piel.
Muchos tratamientos para los fibromas plantares se centran en aliviar los síntomas. Entre ellos se incluyen analgésicos de venta libre, plantillas ortopédicas, pomadas tópicas e inyecciones de cortisona. Pero es poco probable que los fibromas plantares disminuyan de tamaño o se resuelvan sin tratamiento. Tradicionalmente, esto ha requerido una cirugía de escisión que implica una gran incisión en la planta del pie. Este tratamiento conlleva una larga recuperación, la imposibilidad de soportar peso sobre el pie durante un mínimo de tres semanas, puntos de sutura y el uso de ayudas como muletas. También existe la posibilidad de complicaciones quirúrgicas como infección, cicatrices y pérdida de sensibilidad.
Cuánto dura una operación de fibroma plantar
La fascitis plantar es una condición de dolor y daño tisular en la unión de la fascia plantar a la parte inferior del hueso del talón. Las personas que sufren esta afección suelen tener dolor de pies por la mañana o después de periodos de inactividad.
¿Sufre dolor de pies causado por la fascitis plantar? Ya no tiene que sufrir más. Nuestros podólogos del centro y del centro de Nueva York tienen los amplios conocimientos y la experiencia para proporcionar un diagnóstico preciso y un tratamiento personalizado para la fascitis plantar, así como una serie de otros problemas de los pies, incluyendo juanetes y esguinces de tobillo.
¿Sabía que el 90% de los casos de fascitis plantar pueden tratarse con éxito con tratamientos sencillos y conservadores? Sin embargo, cuanto más tiempo pase sin que se trate esta afección del pie, más largo será el proceso de curación y más complicaciones potenciales pueden surgir.
Con el tiempo, la inflamación y la tensión de la fascia plantar pueden provocar pequeños desgarros en la fascia. Esto hará que sus niveles de dolor aumenten gradualmente y, si no se trata, estos desgarros pueden aumentar de tamaño y número, haciendo que la fascia plantar sea más vulnerable a la rotura y el debilitamiento.
Fibroma plantar
Un fibroma plantar es un nudo fibroso (nódulo) en el arco del pie. Está incrustado dentro de la fascia plantar, una banda de tejido que se extiende desde el talón hasta los dedos en la parte inferior del pie. El fibroma plantar puede desarrollarse en uno o ambos pies, es benigno (no maligno) y no suele desaparecer ni reducirse de tamaño sin tratamiento. Las causas definitivas de esta afección no se han identificado claramente, pero existen varias opciones para el tratamiento del fibroma plantar.
El signo característico de un fibroma plantar es un bulto notable en el arco que se siente firme al tacto. Esta masa puede permanecer del mismo tamaño o agrandarse con el tiempo, o pueden desarrollarse fibromas adicionales.
Las personas que tienen un fibroma plantar pueden o no tener dolor. Cuando se produce dolor, suele estar causado por el empuje de los zapatos contra la protuberancia en el arco, aunque también puede surgir al caminar o estar de pie descalzo.
Para diagnosticar un fibroma plantar, el cirujano de pie y tobillo examinará el pie y presionará la zona afectada. A veces esto puede producir dolor que se extiende hasta los dedos de los pies. Puede realizarse una resonancia magnética o una biopsia para evaluar mejor el bulto y ayudar al diagnóstico.
Imágenes de la cirugía del fibroma plantar
El cuerpo humano, aunque asombroso en estructura y función, es propenso a tener pequeños bultos, quistes y otros crecimientos pequeños, normalmente benignos, especialmente a medida que envejecemos. Como traumatólogo, todos los días veo pacientes con estos tumores, que tratamos de forma conservadora y que acaban resolviéndose. Uno de estos "bultos" musculoesqueléticos que se desarrolla en el pie se llama fibroma plantar.
Nadie sabe exactamente qué causa los fibromas plantares, pero se cree que hay un componente genético en su formación. Antes se pensaba que los causaba una herida punzante o correr sobre pavimento duro, pero esas teorías están descartadas. Pueden desarrollarse en uno o ambos pies y parecen darse en hombres y mujeres con la misma frecuencia. Suelen aparecer entre los 20 y los 70 años de edad.
Los fibromas plantares se producen en la zona del arco del pie sobre la fascia plantar, el tejido conjuntivo grueso que envuelve desde nuestro tobillo, por detrás y por debajo de nuestro talón y hasta la base de los dedos. Son lesiones de crecimiento lento y, aunque perceptibles, la mayoría son asintomáticas. Pueden parecer guisantes o canicas bajo la piel, pero algunas pueden ser tan grandes como una pelota de golf. No suelen doler a menos que se golpeen o se pisen, pero en algunos casos llegan a ser dolorosas y molestas. No desaparecen a menos que se extirpen quirúrgicamente.