Fibroma plantar

Fibroma plantar
Índice
  1. Desaparición del fibroma plantar
    1. Correr con fibroma plantar
    2. Cáncer de fibroma plantar
    3. Imágenes del fibroma plantar

Desaparición del fibroma plantar

Un fibroma plantar es un tumor benigno (no canceroso) que se desarrolla en la parte inferior del pie, a menudo en el arco. Se desarrolla dentro de la fascia plantar, que es una banda gruesa de tejido conjuntivo que se extiende por el arco desde el talón hasta todos los dedos. Suele aumentar de tamaño lentamente. La fibromatosis plantar describe el crecimiento de múltiples fibromas de crecimiento más rápido que se encuentran en los ligamentos de la parte inferior del pie. También son benignos y se conocen como enfermedad de Ledderhose.

Los fibromas plantares se presentan como nudos o nódulos en el pie y pueden desarrollarse en uno o ambos pies. Aunque los fibromas no suelen ser dolorosos, a medida que crecen pueden ejercer presión sobre los tejidos y estructuras circundantes, lo que puede provocar dolor e hinchazón. Otros síntomas pueden ser:

Si sospecha que puede tener un fibroma plantar, consulte a su podólogo. Podrá evaluar y diferenciar un fibroma de otras afecciones como un quiste, un granuloma o un posible tumor maligno. A continuación, se elaborará un plan de tratamiento en función de los síntomas y la forma de presentación.

Correr con fibroma plantar

El fibroma plantar es una tumoración que se desarrolla en el arco del pie. No es canceroso. Un fibroma plantar crece en una zona conocida como fascia plantar, que es el tejido grueso que se encuentra en la parte inferior del pie. Este tejido cumple la función de estabilizar el arco del pie y se extiende desde el dedo hasta el talón.

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Actualmente se desconoce la causa del fibroma plantar. Hay indicios que sugieren que la genética aumenta las probabilidades de que se desarrolle un fibroma plantar. Se ha señalado que las personas del norte de Europa tienen más probabilidades de padecer un fibroma plantar.

Algunos expertos creen que existe una relación entre las lesiones o traumatismos y el crecimiento de los fibromas plantares. Hay medicamentos que también se han señalado como posible causa, como los anticonvulsivos, la glucosamina, los betabloqueantes y la vitamina C.

El principal síntoma de un fibroma plantar es un bulto que se desarrolla en el centro del arco en la base del pie. Suelen ser pequeñas protuberancias. Pueden resultar dolorosos si aumentan de tamaño o si se ejerce presión sobre ellos, lo que puede ocurrir al estar descalzo o al caminar.

Cáncer de fibroma plantar

Aunque se desconoce la causa exacta, algunos expertos creen que existe una conexión entre los traumatismos y los fibromas plantares. Una lesión en la fascia puede causar desgarros en el tejido que favorezcan el crecimiento de nódulos.

Para diagnosticar un quiste de fibroma plantar, el médico examina el pie presionando la zona afectada. Este examen táctil puede producir dolor que se extiende a lo largo del pie. Se puede realizar una resonancia magnética o una biopsia para evaluar más a fondo el nódulo.

Ciertos medicamentos tópicos, como el gel transdérmico Verapamil 15%, han demostrado reducir el tamaño de los fibromas plantares si se aplican de forma constante durante varios meses. Se trata de una forma no invasiva de tratar los fibromas plantares.

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Estos medicamentos como Advil, Motrin y aspirina pueden ser útiles para aliviar el dolor y la hinchazón. Por favor, no los tome con el estómago vacío, ya que pueden causar sangrado en el estómago u otros problemas.

Un fibroma plantar es un tejido cicatricial. Es una afección hereditaria que no desaparece con la terapia de masaje de puntos gatillo. Si la masa aumenta de tamaño o de dolor, puede recurrirse a un tratamiento quirúrgico para extirpar el fibroma.

Imágenes del fibroma plantar

La fibromatosis plantar es una afección del pie en la que un pequeño nódulo, un fibroma plantar, crece en el arco del pie sobre la fascia plantar. El fibroma plantar es una neoplasia benigna, es decir, no cancerosa, que tiende a crecer lentamente y suele tener un tamaño inferior a un centímetro. La fibromatosis plantar suele ser indolora pero, dependiendo de la ubicación y el tamaño de los nódulos, puede empezar a causar dolor en el arco del pie cuando se está de pie.Otros términos médicos para la fibromatosis plantar incluyen la Enfermedad de Ledderhose, en honor a Georg Ledderhose que identificó por primera vez la enfermedad en 1894, Morbus Ledderhose y Fibromatosis Fascial Plantar. Es una enfermedad similar a la contractura de Dupytren, que se produce en la mano y provoca la flexión de los dedos.

La fascia plantar discurre entre el talón y los dedos, ayudando a sostener los arcos del pie. Los engrosamientos de la fascia plantar pueden acabar formando pequeños nódulos, fibromas plantares, normalmente en las porciones centrales o mediales de la fascia plantar. Puede haber un nódulo solitario o desarrollarse un grupo de nódulos. Los fibromas plantares son una de las causas más frecuentes de la aparición de un bulto en la planta del pie.La enfermedad de Ledderhose es una afección relativamente leve, pero puede causar dolor en el arco del pie al realizar actividades en las que se soporta peso, como estar de pie y caminar. La fibromatosis plantar suele afectar a un solo pie, pero en el 25% de los casos afecta a ambos pies. No debe confundirse con la fascitis plantar, en la que hay inflamación y degeneración de la fascia plantar.

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