Liquen planta

Liquen de reno

En Norteamérica hay unas 3.600 especies de líquenes, ¡y ésas son sólo las que conocemos! Cada año se hacen nuevos descubrimientos. Los líquenes se encuentran en toda Norteamérica y en todo el mundo. Se encuentran en una gran diversidad de hábitats y climas, desde el desierto de Sonora, en el Bosque Nacional de Coronado, hasta la tundra alpina de las montañas de Alaska, en el Bosque Nacional de Chugach, y en las selvas tropicales del Bosque Nacional de El Yunque, en Puerto Rico.

¿Alguna vez ha visto un liquen y ha sabido que era un liquen? No mucha gente sabe lo que son los líquenes, ¿y quién lo sabría? Parecen de otro planeta. Los líquenes son organismos extraños y no hay dos iguales.

Los líquenes son una forma de vida compleja que consiste en la asociación simbiótica de dos organismos distintos, un hongo y un alga. El socio dominante es el hongo, que confiere al liquen la mayoría de sus características, desde la forma de su talo hasta sus cuerpos fructíferos. El alga puede ser verde o verde azulada, también conocida como cianobacteria. Muchos líquenes tienen ambos tipos de algas.

¿Qué condiciones ambientales necesitan los líquenes para crecer?

El dibujo de una fina sección transversal de un típico talo de liquen folioso (como se denomina al cuerpo de un liquen) visto al microscopio muestra su clara organización interna, con una clara estratificación en zonas funcionales. Las superficies externas similares a la piel, compuestas por células firmemente comprimidas, son la corteza superior e inferior. La mayor parte del área entre la corteza superior e inferior está ocupada por una maraña algodonosa de hifas denominada médula. Entre la médula y la corteza superior, donde pueden penetrar la luz solar y la humedad, se encuentra la fina pero crucial capa de algas. Se trata de una colonia de organismos unicelulares fotosintetizadores, normalmente algas verdes, que son "criados" por el hongo. Es frecuente encontrar rizinas en la superficie inferior. Se trata de pequeños elementos de sujeción que se asemejan a raíces y que anclan el liquen al sustrato. Pueden ser simples (no ramificadas) o ramificadas de diferentes maneras.

Las esporas son células microscópicas individuales que pueden convertirse en nuevos organismos multicelulares completos. El grupo de hongos al que pertenece la gran mayoría de los líquenes, el filo Ascomycota, se denomina a veces "hongos en copa", porque las hifas especializadas en la producción de esporas (los ascos) se agrupan en una pequeña copa con forma de botón, el "apotecio". (Los ascomicetos también se denominan "hongos en saco", por los ascos en forma de saco dentro de los cuales se producen las esporas). Las esporas liberadas en el aire pueden ser sopladas a un nuevo lugar donde germinan y dan lugar a un nuevo hongo. Este nuevo hongo debe encontrar inmediatamente la especie correcta de alga para formar un nuevo liquen, o muere. Algunas algas de los líquenes pueden vivir de forma independiente, pero ningún hongo de los líquenes puede hacerlo. Esto puede parecer fortuito, pero algunos líquenes tienen bastante éxito con este método de reproducción.

Qué es el liquen

Aunque la bibliografía sigue informando sobre compuestos antibacterianos o antifúngicos procedentes de líquenes (revisado en Boustie y Grube, 2005), los talos longevos proporcionan interesantes microhábitats para otros microorganismos eucariotas y procariotas (tanto bacterias como arqueas) (Lawrey y Diederich, 2003; Grube y Berg, 2009; Bjelland et al., 2011; Bates et al., 2012). En años anteriores se prestó cada vez más atención a las bacterias asociadas a los líquenes que no se reconocían como parte integrante de la simbiosis.

En esta revisión discutimos la literatura reciente sobre la microbiota asociada a líquenes centrándonos en la diversidad, funciones, dispersión, especificidad de hábitat y relaciones inter-microbioma de la comunidad bacteriana asociada a Lobaria pulmonaria y concluimos con un esquema para promover una visión holística sobre las interacciones liquen-bacteria. En la primera parte repasamos aspectos históricos y luego discutimos resultados recientes para desarrollar un modelo de liquen más holístico.

La cantidad de bacterias que se encuentran en los líquenes es sorprendentemente alta en relación con las superficies del follaje de plantas superiores. Mientras que la superficie de una hoja comprende sólo 105 células/cm2, algunas especies de líquenes analizadas por su abundancia bacteriana superan este valor de forma espectacular (Saleem, 2015). Por ejemplo, Cladonia rangiferina, está colonizada por aproximadamente 107-108 bacterias por gramo de talo de liquen (Cardinale et al., 2008; Grube et al., 2009). Además, se ha demostrado que los índices de diversidad alfa (índice de Shannon) de las comunidades bacterianas varían entre los distintos líquenes, por ejemplo, de una media de 4,5 (Solorina crocea) a 7,0 (L. pulmonaria) a una distancia genética del 3% entre las OTU microbianas basada en la disimilitud de la secuencia del gen 16S rRNA (Grube et al., 2012; Aschenbrenner et al., 2014).

Liquen fruticuloso

Los líquenes no tienen una cutícula cerosa como las hojas de las plantas, ni tejido vascular como el xilema y el floema para transportar los nutrientes y el agua por el talo. Todo lo que hay en el entorno del liquen es absorbido por su estructura. Los líquenes obtienen el agua y los nutrientes del medio que les rodea a través del aire y la lluvia.

La corteza es la capa externa del talo del liquen. Estas células son más gruesas y están más juntas que las demás células fúngicas del liquen. Esta capa proporciona una pequeña protección, así como color en algunas especies.

Normalmente se puede saber qué tipo de alga tiene un liquen sólo por el color. Cuando un liquen está seco, su color suele ser gris o coloreado como las células fúngicas de la corteza superior. Cuando un liquen está húmedo, esas células se vuelven transparentes, y las células de algas que hay debajo tienen la oportunidad de mostrar su vivacidad.

Las cianobacterias pueden formar una capa bajo la corteza superior o en pequeñas bolsas sobre la corteza superior si ya existe una capa de algas verdes. Las cianobacterias darán al liquen un color verde oscuro, marrón o negro.